29 de abril de 2008

CON TODOS USTEDES, DIOS: NICK CAVE


Desde hace ya algunos años siento una devoción casi mística por una bestia australiana, una especie de bello demonio que siempre logra arañarme las entrañas con sus garras... o como lo quieras decir.
Para los ajenos, es necesario saber que Nicolás Cueva, histriónico en la forma y hondo en el fondo rockero australiano, comenzó sus andanzas en 1984, siendo un auténtico punk gótico , mutó y mutó hasta llegar a un grado de intimísmo tan colosoal que resulta imposible al comenzar a escuchar un disco, no tener tentación de decirle: "lo siento, ¿interrumpo?".

Tomado de EL MUNDO: "Se crió en la Victoria rural, en Australia. Su padre era profesor de inglés y de matemáticas en el colegio del pueblo; su madre era la bibliotecaria del mismo colegio. A principios de los 70 se sentía influido por David Bowie, Lou Reed e Iggy Pop. Todo lo que le parecía 'cool' se encontraba a varios continentes de distancia. A los 12 años ya estaba metido en líos, de modo que sus padres le enviaron a un internado de Melbourne. Fue allí donde conoció a los chicos que se convertirían en los integrantes de The Birthday Party. "Estábamos interesados en el arte y no en los deportes, así que no hubo vuelta de hoja: todo el mundo nos llamaba maricones".
Se dice que un día Cave y sus amigos llegaron al cole con bolsos de mujer y que, cuando comenzaron a insultarles, la emprendieron contra ellos golpeándolos con los bolsos, que llevaban ladrillos en su interior. ¿Es cierto? De pronto se le ve cansado y aburrido. "Ah, parece que estás más interesado en la verdad que en escribir un artículo bueno y entretenido".

¿Prefiere mentir? "No, pero algunas veces la verdad es necesaria y, otras, lo necesario es crear mitos. Cuando hablas de rock and roll, todo se reduce a la creación de mitos. ¿Quién quiere saber la puñetera verdad sobre Jimi Hendrix?".
Cuando tenía 19 años, su padre perdió la vida en un accidente de tráfico. Colin Cave era un hombre serio, convencido de que la cultura era la solución para los males de la sociedad: la belleza salvaría el mundo. Sus ideas, al parecer, inspiraban y enfurecían a la vez a su hijo, que también buscaba la belleza, aunque sólo había encontrado corrupción y destrucción.
Antes de su muerte, padre e hijo se habían distanciado. ¿Dónde se encontraba Nick cuando supo que su padre había muerto? "En realidad, no quiero hablar de ese tema". ¿Por qué? "Me disgusta. Búscalo en Google". "Búscalo en Google" es una de las expresiones favoritas de Cave. De hecho, es lo que hago en cuanto llego a casa. Descubro que el músico estaba en una comisaría, acusado de robo. Su madre, como de costumbre, tuvo que ir a para pagar la fianza. Poco después, Cave puso rumbo a Reino Unido."

Nick Cave es una influencia por sí mismo (en España podemos hablar de Surfin’ Bichos, Migala, Corcobado y Nacho Vegas), pero como en su alma torturada no deja de ser clásico, refleja influjos de otros, como Mick Jagger en los saltos felinos, Neil Young en los paisajes filoyanquis depresivos, o Leonard Cohen en su caudal lírico y a veces recitado. También se puede hacer referencia a Tom Waits, Bob Dylan y un larguísimo etc.
Grandes frases, grandes ideas, grandes letras y gran personaje:
"Siempre me ha interesado más ser respetado que ser famoso. He tomado las decisiones en mi carrera pensando qué era mejor para mi obra. Por cosas como esta hace años que no tengo manager".
"Cuanto más crezco, más ganas de hacer ruido me entran".
Respecto a la disfunción que conlleva la popularidad Nick dice "ya sabe qué le pasa al que ni es famoso de verdad como yo. No quieres atraer la atención, pero si no te la dan gritas: ¡Es que no sabe quién soy! Es esa letal mezcla de egomanía y baja autoestima. Como Hitler".

Cave ha superado sus adicciones -no bebe, no fuma, no toma drogas (adicto a la heroína desde tiempos remotos)-, pero el diablo aún habita en su interior. "Ni crezcas ni madures", ese ha sido su lema para, absorbiendo los sueños y esperanzas de los demás, retomar el escenario como un animal, a sus 50 años, tras 14 discos y pocas, muy pocas giras de presentación (son tímidos: Entre el 2001 y el 2007 apenas ha dado 3 conciertos), por fin nos bendicen con su presencia.
Sobran palabras... o tal vez lo que pasa es que faltan porque ninguna alcanza a describir la magnitud de lo que allí sucedió.
El Pabellón Olímpico de Badalona tembló, lleno hasta los topes. El público era el de siempre, para ninguno era nuestra primera experiencia, de 30 para arriba: embarazadas, ex-yonquis supervivientes, franceses, ingleses... En definitiva, una panda de freakis que con solo un acorde gritabamos: "oooooooooooo" al reconocer inmediatamente la canción. Gente a pie de pista berreando y agitándose, gente sentada en las gradas supervisada por los Billies (eso ponía en el uniforme de los de seguridad) pegando saltos sobre sí misma, moviéndo compulsivamente la cabeza y todo lo que queráis imaginar.

En esta ocasión, Nicolás se apartó del teclado (excepto en el segundo bis, culpa de into my arms), y salió el Nick más gamberro, "el predicador lascivo y poseído que se retuerce sobre el escenario como un animal enjaulado" (David Morán,ABC) el de la guitarra hipereléctrica y abigarrada, esa bestia incontrolable, la de la descarga de rock puro, el carisma y la presencia escénica y entrega inagotable: temas del disco nuevo que hablan de habla de Dios, de la creatividad y de negarse a aceptar el paso del tiempo (los tocaron todos) que no le restó pegada ni intensidad al concierto y muchos anteriores, todos ellos de rock carbonizado y blues inflamado: Red Right Hand, The Ship Song, Get Ready For Love, Straight To You, Stagger Lee, Hard On For Love, Night Of The Lotus Earters, Today´s Lesson; Papa Won´t Leave You, Henry (ESPECTACULAAAAAAAAAAAAR)
Por más años y discos que pasen, mala hierba nunca muere.
Cave es el crooner de los desamparados, la voz poderosa del borracho y el grito rasgado del yonqui; un excelente compositor que supo rodearse de los músicos que mejor le comprendían: Harvey, Race, el insustituible Bargeld con su larga barba y violín eléctrico, guitarricas, flauta travesera... otro vagabundo.
Entrar con muletas y salir andando. Sin duda, he visto a dios.

Enlaces interesantes:
http://www.elmundo.es/elmundo/2008/04/18/cultura/1208522094.html
http://www.diariovasco.com/20080424/cultura/inquietantes-historias-rockeras-nick-20080424.html
http://www.elpais.com/articulo/cultura/furia/tempestad/elpepicul/20080426elpepicul_7/Tes
http://www.muzikalia.com/leerdisco.php?referencia=1859

4 comentarios :

  1. Anónimo dijo...

    yo no podria haberlo dicho mejor. gran critica, impresionante documentacion y mejor estilo. solo puedo añadir una cosa el concierto fue pa' cagarse

  2. Anónimo dijo...

    Y ahora.. haz el favor de colgar todo lo de huesca, maldita friki musical!!!!

  3. Anónimo dijo...

    Buenos aquí va mi comentario... Se que el texto es muy currado pero a mi lo que me llama la atención es que parece que nicolas cave se halla metido dos algodones en la naríz, o quizá serán dos trozos de goma de borrar, como en el cole...

  4. Anónimo dijo...

    ¡Me encanta ese tío! Ojalá hubiera nacido yo unos cuantos años antes, así supongo que podría haber ido a algún concierto (sí, ya sé que estuvo en España en abril, pero empecé a escuchar su música apenas unos días atrás xD). Por cierto, ¿"comenzó sus andanzas en 1984"? Con The Bad Seeds sí, pero ¿qué hay de The Birthday Party e incluso The Boys Next Door?

    PD: ¿Por qué en internet habrá tantos sitios donde hablan de él pero cuando hablo con la gente nadie lo conoce?